jueves, 18 de marzo de 2010

Yuyo verde

Menárdez camina
por los barrios del sur
y mientras recuerda, canta

"Callejón, callejón,

Lejano, lejano.
Íbamos perdidos de la mano
bajo un cielo de verano
soñando en vano.
Un farol, un portón
-igual que en un tango-
y los dos perdidos de la mano
bajo el cielo de verano
que partió"

Lo acompaña el cielo
de un verano que se va
El farol. El tango.
Pero sólo uno camina
por el callejón

"Déjame que llore crudamente

con el llanto viejo adiós.
Donde el callejón se pierde
brotó ese yuyo verde
del perdón.
Déjame que llore y te recuerde
-trenzas que me anudan al portón-
De tu país ya no se vuelve
ni con el yuyo verde
del perdón"

Llora solitario
una pena antigua
Sin adiós ni perdón

"¿Dónde estás? ¿Dónde estás?

¿A dónde te has ido?
¿Dónde están las plumas de mi nido,
la emoción de haber vivido
y aquel cariño?
Un farol, un portón
-igual que un tango-
y este llanto mío entre mis manos
y ese cielo de verano
que partió"

Apura el paso Menárdez
Tal vez en lo del Chino
Con una ginebra
Se ilusione que olvida.







En cursiva, letra del tango Yuyo Verde de Homero Expósito (letra) y Domingo Federico (música) Año 1.944

La versión del video es la que más me gusta, por la Orquesta de Pugliese y con la voz de Alberto Morán


Bar El Chino (Beazley 3566)
El Bar El Chino nació, como "Yuyo verde", en 1944. Fue creación de Jorge “El Chino” Garcés quien, además de atender la parrilla y servir las mesas, cantaba tangos acompañado por guitarristas. Una arquitectura precaria, una ornamentación llena de afiches y fotos, y mesas largas para compartir con otros comensales cubiertas con manteles de papel. Nunca falta una guitarra o bandoneón y ”chansoniers” del barrio.